Libia, la democracia ficticia impuesta por la OTAN


Libia, la democracia ficticia

Con la pantomima de las recientes elecciones generales  legislativas en Libia, el Consejo Nacional   de Transición (CNT) pretende reconocer a un régimen nacido de una agresión militar extranjera,   que devastó al país y borró la estabilidad que   este disfrutó durante 40 años  

Por: Juan Dufflar Amel

Con la pantomima de las recientes elecciones generales   legislativas, celebradas bajo el estado de   alerta el 7 de julio en Libia, el Consejo Nacional   de Transición (CNT) pretende reconocer a un régimen   nacido de una agresión militar extranjera,   que devastó al país y borró la estabilidad que   este disfrutó durante 40 años.   
Engendro de las fuerzas imperialistas coligadas   para el derrocamiento del Gobierno del coronel   Muammar el Gaddafi y el control de la riqueza   petrolera libia, el CNT se hizo del poder en octubre   del pasado año apoyado por los bombardeos de   la Organización del Tratado del Atlántico Norte   (OTAN), el Gobierno de Estados Unidos, sus socios   europeos, el Consejo de Seguridad de Naciones   Unidas y varios Estados de la Liga Árabe que cohonestaron   la subversión.   
En estos nueve meses, las nuevas “autoridades”   no han conseguido restablecer el orden interno,   garantizar la seguridad ciudadana, controlar la   extrema violencia, desarmar las milicias y grupos   rivales, ni frenar los propósitos de los denominados   federalistas del este, que propugnan la autonomía   de la región de Cirenaica.   
La farsa comicial libia, bendecida por las potencias   occidentales como expresión “de la nueva   democracia”, fruto de su injerencia y de una inducida   guerra civil que cobró más de 30 mil vidas, carece   de sustento jurídico, por haberse realizado bajo   un régimen de facto, sin el soporte de una Constitución   y de un estado de derecho que avalen el ejercicio   del sufragio universal.   
A la falta de legitimidad se une el entorno en   que las mismas se desarrollaron, caracterizado por   la situación de desgobierno y la anarquía, la violación   de los derechos humanos, asesinatos de   funcionarios del antiguo régimen, enfrentamientos   entre milicias y facciones armadas   que reclaman su cuota de poder, sin contar   los asaltos, saqueos y robos, y una generalizada   corrupción administrativa.   
Dentro de este panorama, los libios fueron   convocados a elegir por vez primera en   42 años y tras la caída de El Gaddafi, a los   200 miembros del Consejo Nacional General   (Parlamento), “que se encargará de diseñar   la nueva ley electoral y nombrar a los   integrantes de la comisión que redactará la   Constitución”.   
Los resultados oficiales de los comicios   dados a conocer el pasado fin de semana   por la Comisión Electoral, confirmaron   que el partido de la Alianza de Fuerzas   Nacionales (AFN), liderado por el ex primer ministro,   Mahmoud Jibril, obtuvo la victoria con   39 de los 80 escaños reservados para los partidos   políticos en el Congreso.   
En segundo lugar, con 17 escaños, quedó el Partido   Justicia y Construcción (PJC), de corte neoliberal   y brazo político de los Hermanos musulmanes,   encabezado por Mohamed Sawan, quien ha   impugnado el saldo favorable a su adversario. Por   otra parte, el Frente Nacional, que obtuvo la tercera   posición, contará con tres parlamentarios y unos   120 escaños están destinados a candidatos independientes,   pero aún no está definido cómo se van   a organizar dentro del Congreso.   
Estos resultados destaparon de nuevo las   rencillas entre los 300 candidatos partidistas   e independientes que aspiraron a formar parte   del cuerpo legislativo, algunos de los cuales se   pronuncian por el retorno a la monarquía. Sin   embargo, los federalistas dieron la bienvenida al   triunfo de Jibril, considerando que “es el líder   político más cercano a sus posiciones, su pensamiento   y su visión”.   
Jibril ha prometido “la formación de un Gobierno   de coalición capaz de estabilizar el país”,   que sufre aún las consecuencias del conflicto.   
La Casa Blanca y el resto de las potencias occidentales   han batido palmas por la celebración   de estos comicios que les garantizan también resguardar   los objetivos logrados con su intervención   en Libia: la eliminación física de El Gaddafi, el   control político y estratégico del país y el haberse   adueñado de los yacimientos de hidrocarburo, sin   importarles las miles de víctimas, los sacrificios   ni la pobreza causada a su población.   
Este es el modelo que pretenden ahora aplicar   en Siria, con el apoyo político, militar y económico   a los grupos que alimentan la subversión y la caída   del Gobierno constitucional de Bachar Al Assad.  
LIBIA: La violencia en el centro de detención de Sabratha.

Lunes, 23 de julio, dos ciudadanos eritreos resultaron heridos en un tiroteo en el centro de detención de Sabratha, al oeste de Trípoli. Según la versión facilitada por las autoridades libias no habría un intento de escapar del centro de masa, en la que los guardias fueron atacados y respondieron con disparos.

En cambio, según la versión de girar por el Habeshia, más de 300 prisioneros que se quedaron sin comida ni agua desde el viernes 20 de julio, a partir del mes de Ramadán.La mayoría de los presos no son musulmanes.

El centro de Sabratha fue visitado varias veces en las 2 últimas semanas por parte del personal del CIR en Trípoli y su organización asociada. El 19 de julio había 281 presos extranjeros, incluidos los eritreos 174, para un total de 51 mujeres embarazadas entre ellos 35 de Eritrea y cinco años. También hay un niño muy pequeño en Sudán, que se celebró con sus padres ..

En los últimos días por parte de otras personas interceptadas en aguas de Libia fueron llevados al centro de detención.

El CIR en los próximos días para obtener información más detallada.

Las peticiones del CIR que las autoridades libias a cumplir inmediatamente con la diversidad religiosa de los detenidos no musulmanes por el suministro de alimentos y agua durante todo el día, y para los musulmanes después del atardecer. CIR también afirma que el accidente del domingo pasado es investigada por una autoridad independiente.

Por supuesto, esta petición se debe dar respuestas a, incluso independientemente de su necesidad, es evidente que solicitado por el CIR, para permitir a los inmigrantes a solicitar asilo y para convertir a este centro como los otros centros de detención que cumplan las normas internacional, en espera de soluciones duraderas basadas en la condición de cada persona u hogar.


Los negros libios y migrantes en Libia están llamados a vengarse de la brutalidad sufrida


La llamada “revolución libia” no ha sido otra cosa mas que un estallido de la escoria social libia que acumulaba los peores y mas bajos instintos con todo el apoyo militar tecnológico mas avanzado del Mundo. Sin ello, la Guardia Popular, las fuerzas de seguridad, el ejército y los comités populares hubiesen dado su merecido a esas bandas de racistas inmundos que en Bengasi, Misurata y Trípoli han cometido un verdadero genocidio contra la población negra libia que representa un tercio del total de la población del país y la numerosa comunidad subsahariana llegada a construir esa hermosa Patria africana, solidaria, igualitaria, próspera y antimperialista llamada la Gran Yamahiriya árabe libia popular socialista. 

Es paradójico que ha sido un presidente negro norteamericano quien haya dirigido el exterminio de los negros africanos en Libia. Sin embargo los negros libios y migrantes en Libia no han sido solo víctimas desválidas. La contrarrevolución apoyada y dirigida por la OTAN y Qatar ha hecho de los negros feroces enemigos de ese régimen despótico y criminal muy mal instalado y peor consolidado que esconde tras las botas de los mercenarios de Blakcwater, de las fuerzas especiales que guardan los pozos petroleros, de las agencias de espionaje que vigilan puertos, fronteras, aeropuertos y lugares estratégicos. 

Los libios negros siguen viviendo en los oasis del Fezzan con sus hermanos tuaregs, sufren prisión con sus hermanos árabes y bereberes gadafistas y traman la venganza contra los racistas criminales. Sus crímenes no se olvidan ni se olvidarán.

Barbarie antinegra cometida por las ratas de Al Qaeda y Qatar en Trípoli


Los descendientes de los traficantes árabes de esclavos negros es la nueva burguesía asesina en el poder en Libia


Los pueblos africanos no están dispuestos a olvidar los crímenes de las ratas despreciables


Está bien clara la naturaleza racista y fascista de las ratas así como el carácter interracial y fraterno de la Gran Yamahiriya árabe libia popular socialista


Hombre negro muestra cicatrices de tortura por los rebeldes del CNT


Hombre negro detenido y abofeteado por delincuente "rebeldes" del CNT/OTAN



LOS CRIMINALES "REBELDES" DE LA OTAN/CNT
TORTURAN, HUMILLAN Y ASESINAN A NEGROS
Y LA ONU GUARDA UN SILENCIO COMPLICE