La izquierda y la polémica sobre Libia.
Internacionalismos de geometría variable
Es difícil desde las categorías habituales de
la izquierda (lucha de clases binaria, representación de la clase obrera por un
partido, socialismo etc.) comprender las revoluciones árabes y los propios
movimientos sociales que, bajo distintas formas, están produciéndose hoy en
Europa, en España y en Grecia, pero también en Gran Bretaña. Unos movimientos
sociales de nuevo tipo que probablemente seguirán extendiéndose y que tienen muchos
puntos en común con lo que ya pudimos presenciar en las diversas crisis políticas
latinoamericanas: en el caracazo, el diciembre argentino, las luchas por el
agua en Bolivia etc. Son luchas que, a pesar de la distancia geográfica y
cultural y de los distintos discursos políticos en que se traducen responden a
una misma situación: el dominio tendencialmente absoluto del capital
financiarizado sobre las economías de los distintos países y las vidas de sus
habitantes. No es de extrañar, por lo tanto, que los aparatos de propaganda del
Imperio hayan hecho hasta ahora todo lo posible por ocultar las conexiones
efectivas entre los distintos polos de una enorme marea de resistencias que
amenaza al sistema capitalista en su conjunto. Más sorprendente y hasta
lamentable es que estas conexiones hayan resultado indescifrables para un
amplio sector de la izquierda latinoamericana y europea.
Del lado árabe, la relación entre los
distintos procesos estuvo siempre bastante clara. Entre los puntos de
referencia de muchos manifestantes tunecinos y egipcios estaban la revolución bolivariana
de Venezuela o la revolución cubana: el paralelismo histórico era perceptible.
Del lado latinoamericano, sin embargo, no se vieron, en general, estas
revoluciones populares espontáneas y autoorganizadas con la misma simpatía. La
reacción fue de desconfianza, cuando no de miedo, no fuera a ser que detrás de
los dirigentes árabes derrocados estuvieran situados los gobernantes
latinoamericanos de izquierda, en alguna lista secreta de los responsables de
la CIA. La teoría de la conspiración pudo más que el análisis de las luchas de clases
efectivas que se desarrollaban en Túnez, Egipto y un gran número de países
árabes, así como en la propia Europa. La reacción defensiva, prevaleció sobre
la percepción de una coyuntura revolucionaria, por otra parte evidente Si los
déspotas iban cayendo uno tras otro y el proceso revolucionario se contagiaba
como un reguero de pólvora, tenía que haber sido orquestado por algún poder
oculto. A nadie se le pudo ocurrir que existe un espacio geopolítico y de
civilización específicamente árabe, con estructuras y coyunturas sociales y políticas
afines en el que el contagio es relativamente fácil. En el poco francófono
Egipto, se podían ver carteles de "Mubarak, dégage" (Mubarak,
lárgate) en buen francés de Túnez, en el Bengasi liberado, una señora canta el
himno nacional...tunecino que honra a los mártires de la independencia. Hay una
intertextualidad de las revoluciones árabes, como la hubo - y la hay- de las
latinoamericanas. Sin embargo, para un sector de la izquierda acostumbrado por
la guerra fría a pensar en términos de bloques, la improbable conspiración del
imperio contra regímenes amigos e incluso vasallos como el de Ben Ali o el de
Mubarak podía ser la antesala de un ataque contra los gobiernos revolucionarios
de América Latina. Frente al bloque del Imperio, sólo cabía la desconfianza
ante las nuevas revoluciones, tanto más cuando sus protagonistas no eran
"obreros organizados y conscientes", sino en gran medida trabajadores
precarios, estudiantes y miembros de las clases medias urbanas depauperadas por
la economía financiarizada a través del arma implacable de la deuda con su
cohorte de liquidación de derechos sociales y de servicios públicos.
La teoría de la conspiración, sin embargo,
pareció encontrar una confirmación cuando un sector importante del pueblo libio
se alzó contra el déspota local y dirigente de una supuesta
"revolución". Esta fingida postura "revolucionaria" nunca
impidió a Muammar el Gadafi matar comunistas y otros militantes de la oposición
ni establecer pactos con personajes como Berlusconi y los dirigentes de la
Unión Europea sobre "la gestión de las fronteras de la UE", cuyo
contenido real da escalofríos. Gadafi no mostró grandes reparos ante la
invasión de Iraq, ni se negó nunca a ayudar a norteamericanos y británicos en su
"guerra contra el terror", haciendo que sus expertos servicios
policiales sometieran a "minuciosos interrogatorios" a los
prisioneros que les entregaban. Por no hablar de las medidas de política
interior, como la entrega del petróleo libio a empresas occidentales.
Nada, sino esta identificación con una
revolución de pacotilla y el miedo a ser los siguientes en la lista, justifica
la solidaridad que, desde el primer momento, el presidente Hugo Chávez manifestó
hacia el tirano libio acosado por la insurrección de buena parte de su pueblo.
Gadafi dio, sin embargo, al Imperio la
oportunidad que le hacía falta para entrar en la región e intentar interferir
en los procesos revolucionarios en curso: lo hizo reprimiendo con brutalidad a
la población insurrecta y forzándola a defenderse por las armas, lo que nunca
se había producido en las demás revoluciones árabes. Francia y en menor grado
el Reino Unido aprovecharon esta oportunidad inesperada para recuperar ante los
pueblos árabes algo de influencia, pues precisamente las revoluciones de Túnez
y de Egipto habían derribado a sus protegidos en la zona. Para intervenir en
Libia, naturalmente, tuvieron que metamorfosear de nuevo a Gadafi y, en pocos
días hacer del "amigo de occidente un poco extravagante" del que hablaba
Aznar un déspota que oprime y asesina a su población.
La ayuda a la población insurrecta contra el
déspota respetó la plantilla de las intervenciones habituales de la OTAN:
bombardeos de objetivos civiles y militares, violación de la carta de las
Naciones Unidas y de la propia Carta Atlántica al proponerse un "cambio de
régimen" como objetivo de una operación destinada a "proteger a las
poblaciones" y el largo etcétera que conocemos desde la guerra de
Yugoslavia y las guerras del Golfo, pasando por Afganistán. El coste para la
insurrección libia de esta "ayuda" mediante el bombardeo humanitario
es evidente. También es enorme el riesgo de que la revolución Libia quede secuestrada
por quienes le han ayudado a triunfar. Algo de sobra conocido para quien conozca
la historia de Cuba o la de Filipinas, países en los que los Estados Unidos
"ayudaron" a las poblaciones locales a liberarse de los españoles
para después recolonizar en grados diversos ambos países. A pesar de este coste
y de este riesgo, tiene razón Santiago Alba y tienen razón nuestros amigos y
compañeros árabes en sostener que todo habría sido peor si se hubiera permitido
a Gadafi aplastar la revuelta, pues el pedigrí represivo del amigo de Aznar y
Berlusconi no deja lugar a ninguna duda. Por no hablar del terrible ejemplo que
habría dado a los demás tiranos árabes.
La situación de Libia y la de las demás
revoluciones árabes es compleja, pero ¿acaso hay un solo proceso revolucionario
que no lo sea? ¿acaso ha habido una sola revolución cortada por un patrón
preexistente? La propia revolución cubana fue vista en sus primeros momentos
por la izquierda como una simple revolución democrática y antiimperialista
burguesa...En este momento, tanto en Túnez, como en Egipto o en Libia existen
gobiernos que ya no representan enteramente a la dictadura, pero que tampoco
son expresión de la voluntad del pueblo insurgente. El Consejo Nacional de
Transición, alianza inestable de oportunistas prooccidentales, islamistas más o
menos radicales y tránsfugas del régimen de Gadafi no representa la revolución
libia, cuyos verdaderos protagonistas, los shabab (jóvenes) que resistieron
contra Gadafi no han dicho aún su última palabra. Cierto es que estamos en las primeras
fases de esos procesos revolucionarios y que existe una enorme incertidumbre,
pero esto, más bien, sería una razón para que los países que ya han pasado por
trances semejantes y han conseguido realizar importantes transformaciones
presten su apoyo a estos procesos y dentro de ellos a las fuerzas de izquierda
que, por fin, están renaciendo en el
mundo árabe. No dice otra cosa mi querido
amigo y camarada Santiago Alba, y, por decirlo, ha sido tachado de "agente
de la CIA" o de émulo del filosofastro Bernard-Henri Lévi.
Siempre se descubre algo: no sabía yo que la
CIA contratara a defensores públicos del comunismo y de los procesos
revolucionarios anticapitalistas y antiimperialistas del mundo entero, ni que
tuviéramos que dar la bienvenida a Bernard-Henri Lévi al bando de quienes combatimos
el imperio del capital. Que el sectarismo no nos ciegue: ni la CIA es tan
tonta, ni Bernard-Henri Lévi se ha caído del caballo...camino de Damasco.
MENSAJE PARA TODA LA HUMANIDAD: "LA
TERCERA GUERRA MUNDIAL"
La guerra sin fin en la humanidad occidental
después de que Libia -
Siria, Irán
La guerra sin fin en la humanidad occidental
después de que Libia - Siria, en el artículo IranCet fue escrito en enero de
Nicaragua harina de Tortilla con Sal Solo editor de Toni. Es quizás uno de
los más completos análisis del idioma Inglés, que abarca el contexto histórico
de la actual agresión imperialista contra Siria e Irán, los pasos (incluyendo
la fabricación de consentimiento de los ciudadanos) que conducen las guerras en
el oeste, las lecciones de la guerra en Libia, el fracaso de la comunidad
internacional "izquierda" en la movilización de la solidaridad para
las víctimas de estas guerras y las implicaciones de los recientes
acontecimientos en el todo el "desarrollo" del mundo, con especial
énfasis en América Latina progresista. - Lizzie Phelan
Por Toni Solo
De acuerdo con Libia, las oligarquías ricas
de Europa y América del Norte continúan su secular guerra contra la humanidad,
ahora atacar a Siria e Irán. Ellos y sus aliados en la región nunca se
concedería una participación equitativa de los recursos económicos en el mundo
para la mayoría del mundo pobre. La consecuencia inevitable de esta
realidad estratégica en el mundo es un asalto sin fin por los países de la OTAN
y sus aliados en contra de un gobierno extranjero o movimiento político que se
resiste a su voluntad.
La experiencia de Libia muestra que cuando
las condiciones lo permiten, las oligarquías democráticas anti-occidentales
siempre va a querer destruir a los países independientes, cuyas condiciones los
gobiernos tratan de poner en peligro o negociar. Tal como Libia, Irán y
Siria tienen una larga experiencia histórica de la perfidia imperialista, por
los poderes imperiales occidentales, Estados Unidos Gran Bretaña y
Francia. Así que estos países no es probable que ceder a las demandas de
los países de la OTAN.
Los iraníes han recuperado el control de su
país después de la revolución islámica de 1979. En Siria, el nacionalismo
feroz que tomó forma como un gobierno socialista laico. Irán y Siria han
tratado de promover tanto el desarrollo económico muy complejo, mientras que la
gestión de la diversidad religiosa, étnica y cultural.
Siria -
el contexto histórico
Siria, ahora con una población de más de 23
millones de habitantes, se independizó de Francia en 1946. Las dos
primeras décadas de la independencia de la nueva república se caracterizaron
por una sucesión de gobiernos inestables. La unión política experimental
con Egipto en la década de 1950 falló. En última instancia, el socialista
Partido Baath tomó el poder en 1963. Más tarde, en 1970, Hafez al-Assad se
convirtió en presidente después de una lucha interna de poder dentro del
gobierno.
Bajo el gobierno de Hafez al Assad, Siria ha
aumentado su procesamiento por un alto crecimiento económico basado
principalmente en la agricultura y el petróleo. Después de 2000, cuando su
hijo Bashar al-Assad se convirtió en presidente, Siria sigue apoyando el buen
desempeño económico. Sin embargo, los recientes intentos de poner en
práctica las reformas liberales en respuesta a las críticas tanto de la
oposición interna y la presión extranjera han tenido un éxito
limitado. Los Estados Unidos y sus aliados han buscado activamente para
explotar las oportunidades creadas por los intentos del propio gobierno sirio
de reforma.
Siria se vio constantemente amenazado por la
agresión militar sionista desde que Israel se fundó en 1948 y se sometió a los
ataques aéreos israelíes en varias ocasiones durante la última década. La
invasión y ocupación israelí del vecino Líbano en 1982, seriamente amenazados
los intereses de Siria. El gobierno sirio contrarrestada por la
intervención militar propia. La ocupación israelí del sur del Líbano sólo
terminó en 2000 después de décadas de feroz resistencia organizada
principalmente por el Hezbollah islámica político-
militar del movimiento. Hezbolá es un
aliado clave de Siria e Irán.
Junto con la amenaza planteada por la
ocupación israelí de Líbano, Siria también ha sido constantemente amenazada por
la continua ocupación de Israel de las Alturas del Golán, territorio sirio
capturado por Israel en 1967 y detenido ilegalmente desde entonces. Esta
ocupación ha sido condenado a la Resolución 497, una de las muchas resoluciones
de la ONU con desprecio violados por el gobierno sionista de Israel bajo la
protección de sus aliados militares más importantes, los Estados Unidos,
Francia y Gran Bretaña. En términos prácticos, Israel siempre ha sido un
miembro de facto de la OTAN.Es en este contexto histórico que Siria ha
mantenido una importante presencia militar en el Líbano hasta el año 2005.
En febrero de este año, un coche bomba fue
utilizada para asesinar al líder político libanés Rafik Hariri, un crítico de
Siria, señaló. Las potencias occidentales en el Consejo de Seguridad
presionó para que un tribunal especial para investigar el asesinato. El
asesinato de Hariri fue llevada a cabo por los aliados de políticas de la OTAN
en el Líbano y la región para extraer la fuerza de Siria del Líbano. Desde
entonces, la OTAN y sus aliados regionales, entre ellos Arabia Saudita y las
monarquías feudales colegas en los Estados del Golfo, han utilizado el Tribunal
Especial de las Naciones Unidas para intimidar y amenazar a Siria y sus aliados
regionales, principal a Hizbulá en el Líbano.
El Tribunal Especial de la ONU, después de
que inicialmente la nivelación sospechas en contra de Siria, ha cambiado
recientemente su objetivo de atacar a Hezbolá. Nunca se consideró una
evidencia muy grave que sugiere una posible implicación de Israel en el
asesinato de Hariri. Este comportamiento por el Tribunal Especial de la
ONU sobre el Líbano de forma paralela muy de cerca lo que sucedió con la
manipulación deshonesta de la investigación del atentado de Lockerbie por
motivos políticos en el caso de Libia.
A diferencia de Libia, al igual que Irán,
Siria encontró apoyo diplomático bastante fuerte de Rusia y China, así como los
países latinoamericanos, entre ellos Brasil, Cuba, Nicaragua y
Venezuela. Aunque la OTAN y sus aliados para imponer sanciones, Rusia ha
firmado recientemente acuerdos de armas con Siria, en la práctica una clara
señal de que rechaza la política de la OTAN hacia sus aliados regionales, Siria
e Irán. Diplomáticos rusos han condenado públicamente-frente a las
sanciones impuestas a Siria.
La posición de China es menos claro, dada su
alta dependencia de los suministros de petróleo confiables. Persistente de
EE.UU. y aliados provocaciones pueden conducir a Irán a tomar represalias en
contra de las sanciones por el cierre del Estrecho de Ormuz, de importancia
estratégica. De esta manera, las potencias de la OTAN para crear
incertidumbre sobre la seguridad de los suministros de petróleo a China y la
estabilidad de los precios del petróleo en los mercados
internacionales. Lo que está sucediendo en Siria es directamente relevante
en términos de cómo puede influir en las políticas de Irán.
La reciente visita del primer ministro chino
Wen Jiabao a Arabia Saudita, Qatar, Emiratos Árabes Unidos a la que ha estado
directamente relacionada con este dilema. Obviamente, son las potencias de
la OTAN y la sede de aliados de la OTAN que están causando grave inestabilidad
en los mercados internacionales del petróleo. Esta inestabilidad podría
perjudicar a los EE.UU. y Europa, así como sus rivales asiáticos, si el propio
Irán de represalias económicas.
Vecino musulmán de Siria, Turquía, ha jugado
un doble juego más complejo en los últimos años que la región de las tiranías
feudales antagonistas Árabe Socialista de Siria. Él ha tratado de
equilibrar sus intereses regionales como una gran potencia musulmana de Asia
Central sobre sus antiguas aspiraciones de unirse a la Unión Europea y su
condición de miembro de la OTAN. Desde hace algunos años antes de la
guerra contra Libia, Turquía parece estar interesado en desarrollar una
relación estratégica con Siria e Irán.
El ataque israelí de 2010 contra el barco
Mavi Marmara llevar a activistas por la paz en Palestina parece exacerbar las
diferencias entre Turquía y sus aliados de la OTAN. Sin embargo, durante
la actual crisis en Siria, Turquía apoyó decididamente la agresión de la OTAN
contra su vecino. El gobierno del primer ministro Erdogan, ha permitido la
creación de grupos terroristas que atacan a Siria del territorio turco.
El gobierno turco también ha defendido y
aplicado sanciones contra Siria y su gente dañando parte de la campaña cada vez
más siniestro para derrocar al gobierno del Partido Baaz sirio encabezado por
Bashar al-Assad. Pero Turquía también tiene un gran interés en una
relación estable con Irán. Sus complejos de los intereses regionales,
finalmente puede forzar el primer ministro Erdogan, para moderar la política
actual de Turquía a Siria.
La
crisis actual Siria
Los disturbios comenzaron en Siria en enero
de 2011 como parte de un intento a nivel regional por las potencias de la OTAN
y sus aliados locales para explotar la presión popular para el cambio
político. En marzo de ese año, los eventos en la ciudad de Deraa causó
dudosas afirmaciones de las fuerzas gubernamentales dispararon contra manifestantes
desarmados, como ocurrió en Libia.Alentó a los terroristas, entrenados y
equipados por Arabia Saudita y sus aliados como Qatar y protegidos por Turquía,
atacaron a las fuerzas de seguridad del gobierno en Baniyas, Homs, Hama y,
entre otras ciudades.
Pero el apoyo popular al gobierno sirio y por
el presidente Assad sigue siendo más del 50% a pesar de una masiva campaña de
desinformación llevada a cabo por los medios de comunicación internacionales de
los negocios de la OTAN y organización de derechos humanos. Las potencias
de la OTAN y sus aliados regionales han buscado por mucho tiempo para
desestabilizar el gobierno socialista de Siria independiente. La razón de
su acción es similar a la utilizada para destruir Libia.Han alentado, entrenado
y suministrado los grupos subversivos terroristas, utilizando una amplia
campaña de guerra psicológica tanto para ocultar y justificar el alcance de su
intervención agresiva.
Secretario General Ban Ki-moon, ha demostrado
una vez más fuera de toda duda que es un siervo abyecto de los Estados Unidos y
sus aliados.Arrastró a su oficina y la propia ONU profunda en el descrédito
como una herramienta de flagrante de la intervención colonial en el mundo al
servicio de las élites empresariales occidentales. De acuerdo a Ban Ki
Moon, las Naciones Unidas está siendo violado su propia Carta, como lo hizo en
Libia, en colusión con la OTAN y la Liga Árabe, dominada por Arabia Saudita
para garantizar las condiciones para una agresión militar contra Siria, tal vez
llevado por Turquía.
La
represión imperial
La crisis en Siria sobre todo no se debe a
los llamados populares a la reforma, pero ante la presión extranjera y la
intervención. Las técnicas utilizadas en contra de Siria por las potencias
occidentales y sus aliados regionales están lejos de ser nueva. Ellos
fueron utilizados durante los últimos cincuenta años para maltratar y
deshumanizar a los palestinos, para demonizar a Cuba y Corea del Norte y
justificar un programa de fin de la agresión en todo el mundo.
Ahora, las potencias de la OTAN, con su larga
y vergonzosa historia de la conquista colonial, se han actualizado y
perfeccionado conjunto de herramientas de la represión imperial. Antes de
Siria, que utilizaron contra Iraq, Afganistán, Somalia, Sudán, Haití, Honduras,
Costa de Marfil y, más recientemente, Libia. La campaña comienza con la
maquinaria de guerra psicológica más por los grandes medios occidentales y las
organizaciones no gubernamentales para apoyar las medidas del gobierno de
agresión contra el país de destino.
La guerra de la propaganda siempre se compone
de las acusaciones distorsionadas y exageradas de violaciónes de derechos
humanos, la corrupción y la falta de democracia. Estos cargos suelen
aumentar para incluir las demandas que el gobierno de la meta de causar una
desestabilización regional. Cuando las condiciones preparadas por esta
guerra psicológica, se mueve permiso de la agresión en el ámbito económico con
las convocatorias de las sanciones, ya sean legales o ilegales.
Después de esta fase de la guerra económica,
el siguiente paso es una de la subversión armada a través de apoderados
locales. La pérdida de vidas causada por esta subversión terrorista se
puede utilizar para activar medidas a través del sistema jurídico
internacional, si es posible a través de la Corte Penal Internacional,
claramente un instrumento del imperialismo occidental. Todo este proceso
abre el camino para la intervención militar directa, se propone en la
preferencia al Consejo de Seguridad de la ONU por un organismo regional dominado
por los aliados occidentales.
La Liga Árabe ha servido para este propósito
en contra de Libia y se utiliza actualmente en los esfuerzos de la OTAN para
destruir a Siria. Es casi seguro que se utilizará para completar los
preparativos para una agresión contra Irán a desarrollar. Pero Irán es un
objetivo mucho más complejo de lo que Siria, debido a que es uno de los países
más grandes del mundo, tanto en la extensión territorial y con una población de
más de 70 millones de euros.
Irán
La historia de Irán en el siglo pasado, común
a la mayoría de la región, fue una de la opresión colonial y la explotación
extranjera. Tras el golpe antidemocrático en el año 1953, el país ha
experimentado a lo largo de 25 años de dependencia neocolonial, alentado por la
dictadura de Mohammad Reza Pahlavi. Pahlavi era un aliado incondicional de
los países de la OTAN en el molde de dictadores como Anastasio Somoza, Mobutu
Sese o de Ferdinand Marcos. El presidente de Nicaragua Daniel Ortega, a
menudo se refiere a las revoluciones gemelas de 1979 para recordar que tanto
las naciones de Irán y Nicaragua liberó a su país de la dictadura cruel de ese
año.
Después de la Revolución Islámica en Irán,
las potencias de la OTAN apoyó la guerra en el largo presidente iraquí Saddam
Hussein contra Irán, que duró desde 1980 a 1988. A menudo se olvida de que
Siria fue uno de los pocos países árabes para apoyar a Irán durante la
guerra. Aliados regionales en la OTAN, Israel, Arabia Saudita y las
tiranías del Golfo, Irán todo el miedo, porque tiene un gobierno poderoso se ha
comprometido con el cambio regional basado en los ideales de la Revolución
Islámica propia.
A pesar de la moderación de la política
regional de Irán después de la guerra revolucionaria contra Irak, que defiende
su soberanía sin compromiso.Política cínica externa de los países de la OTAN a
Irán pasó por diferentes fases de la Vivienda, el oportunismo y la hostilidad
incómoda que culminó en la actual fase de la agresión, la pura y simple solo
por debajo de un conflicto armado. Los EE.UU., en particular, ha
aprovechado el desarrollo de la energía nuclear de Irán como una de las causas
de la guerra.
Irán ha tratado de desarrollar la energía
nuclear desde la década de 1950. Sin embargo, Estados Unidos e Israel han
comenzado a explotar el programa iraní de energía nuclear como un pretexto para
las sanciones agresivas en 2003, el mismo año en que las potencias de la OTAN y
sus aliados invadieron Irak con el falso pretexto de que "temían las armas
de destrucción masiva. Los Estados Unidos y sus aliados siempre han
explotado la Autoridad Internacional de Energía Atómica Atómica políticamente
contra Irán, con sus procedimientos para crear pretextos para una agresión
militar y económica.
El actual Director General del OIEA Yukiya
Amano, considera aún más sensible a la presión de los gobiernos de los países
de la OTAN como su predecesor, Mohamed al Baradei. Las posibles maneras de
atacar el programa nuclear de Irán se discuten abiertamente en el negocio de
los medios occidentales como parte de una guerra psicológica contra Irán
constante. Los ataques armados han incluido asesinatos terroristas de
científicos nucleares iraníes y otros ataques terroristas dirigidos por el
miembro de la OTAN de facto de Israel.
La hipocresía notoria extrema de los
gobiernos de los países de la OTAN ha llegado a extremos sin precedentes en el
caso de Irán. Las potencias de la OTAN para proteger ilegal de Israel
programa de armas nucleares, pero para atacar a Irán a desarrollar energía
nuclear con fines pacíficos.Ellos y sus aliados flagrante conducta guerra
terrorista contra Irán con organizaciones terroristas, ya que condenar la mujaidines
del pueblo, ya que utiliza Al Qaeda en el Líbano, Libia y Siria en la
actualidad.
Del mismo modo, los Estados Unidos e Israel
han utilizado su altamente desarrollado una capacidad de guerra cibernética
para sabotear la industria de Irán y la capacidad de investigación, con el
gusano Stuxnet software malicioso para los sistemas informáticos de los daños
en Irán. Este modelo de guerra psicológica, falsos pretextos para la
agresión, las sanciones económicas y el terrorismo pura y simple se usa contra
todos los gobiernos dirigidos por los países de la OTAN de la élite y sus
aliados corporativos. En la década de 1930, un comportamiento similar por
parte de Alemania e Italia, fue llamado por su verdadero nombre - el fascismo.
Sin embargo, Irán tiene muchas ventajas sobre
Siria, en términos de su capacidad para defenderse. La más obvia de estas
ventajas es su tamaño, tanto en términos de su territorio y su
población. Es el papel como
proveedor de la petrolera internacional y gas
a China y muchos otros países, lo que complica los planes de ataque militar de
la OTAN. Más del 30% de los suministros internacionales del petróleo pasan
a través del Estrecho de Ormuz, controlado por Irán.La geografía de Irán,
también trabaja en su favor porque, de nuevo, el Estrecho de Ormuz es una
trampa potencialmente peligroso para las fuerzas navales de ataque de la OTAN.
La tecnología de misiles a Irán y su
capacidad es genial. Su dominio de la guerra electrónica fue evidente en
la guerra de 2006 entre Israel y el Líbano. Allí, aliado de Hezbolá a Irán
la práctica, neutralizar la guerra electrónica de Israel y se controlan
constantemente las comunicaciones militares israelíes. Por todas estas
razones, cualquier ataque contra Irán será sin duda mucho más complejo en su
planificación y puesta en práctica y mucho más costosa en términos financieros
como en términos de bajas a los atacantes que las guerras contra Afganistán,
Irak o Libia.
Además, varios países poderosos rechazan
enérgicamente los preparativos de la OTAN claros para la agresión
militar. Entre estos países, Rusia y China son los más franca, pero Brasil
y la India también han expresado su rechazo a la agresión armada. Todos
estos países, especialmente Rusia y China, plenamente conscientes de que la
agresión contra Siria e Irán es la forma en que las potencias occidentales a
América del Norte y Europa la esperanza de detener su declive relativo de poder
e influencia global, en particular con respecto a Asia.
Por su parte, la India tiene una relación
comercial muy fuerte con Irán, que suministra alrededor del 14% de las
necesidades actuales del petróleo de la India en total. India es también
un socio en el gasoducto Irán transportar gas iraní a la medida en que los
principales Pakistán. A pesar de que se ha reunido recientemente para
presionar a los EE.UU. a votar en contra de Irán en la Autoridad de Energía
Atómica Internacional sobre la cuestión del programa nuclear de Irán, la India
apoya el derecho de la Irán a desarrollar energía nuclear.
India sería poco probable que tomar partido
en un conflicto potencial entre Irán con armas y los países de la OTAN y sus
aliados locales.Asimismo, Brasil ha apoyado firmemente el derecho de Irán a
desarrollar energía nuclear y Rousseff es probable que mantenga esta
posición.En un giro interesante a las recientes complicaciones regionales,
Turquía se ha negado a respaldar nuevas sanciones contra Irán no autorizada por
la ONU, la OTAN.
Esta es una confirmación rotunda de que Irán
está lejos de la caricatura de paria aislado presentado en la compañía de
medios occidentales. Es fácil olvidar que Irán es un probable candidato
para ingresar a la Organización de Cooperación de Shanghai. Irán está
involucrado en importantes proyectos de construcción de vías férreas con
miembros de la OCS Turkmenistán y Kazajstán.
La OCS está integrada por China, Rusia,
Kazajstán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán, entre ellos casi una cuarta
parte de la población total del mundo. Cualquier ataque contra Irán, un
gran poder regional de influencia, los efectos serán muy volátiles e
impredecibles en la economía global y un impacto devastador en la
región. Esta realidad puede muy bien llevar las mentes más sobrias en los
países de la OTAN para resistir la presión de sus aliados locales como Israel y
Arabia Saudí para lanzar un ataque militar contra Irán
Lecciones
de Libia
Por su parte, Irán y Siria, así se puede
lamentar el apoyo que dio a la OTAN cons-revolucionario golpe de estado y la
guerra colonial de agresión en Libia.El régimen títere de la OTAN en Libia NTC
devuelto a Irán y Siria por el cierre de la embajada en Trípoli y el
reconocimiento del gobierno sirio de Siria oposición SNC propia como el
gobierno legítimo de Siria. CEPRID Alberto Cruz señaló que las fuerzas
especiales británicas incluso se jactan en su página web que tienen los
combatientes armados y entrenados de Al Qaeda turca territorio libio para
atacar a la población siria.
La experiencia reciente de Libia ha reforzado
la lección mientras los oligarcas de América del Norte y Europa siempre va a
destruir a los países independientes que se resisten a su voluntad. La
guerra de Libia también mostró que, paradójicamente, Irán comparte el abandono
de las potencias de la OTAN de los principios básicos de la ONU de no agresión
y la autodeterminación de los pueblos. Este abandono tiene que aplicar el
principio de responsabilidad engañosa para proteger errónea.
Esto condujo directamente a la destrucción de
Libia, la continua agresión contra Siria y la agresión militar contra Irán a
desarrollar. Al igual que Rusia y China, Irán es ahora parte de las
secuelas que sufre de su apoyo a la destrucción de Libia. Es justo decir
que si Rusia, China e Irán habían defendido el principio de no agresión en el
caso de Libia, las potencias de la OTAN nunca han sido capaces de desestabilizar
a Siria si fácilmente.
La incapacidad de Irán para defender los
principios fundadores de la ONU se vio compensado por el colapso completo de lo
que se denomina la izquierda internacional. Con pocas excepciones, los
radicales, progresistas, socialistas y anarquistas opinión se apoyó
abiertamente la guerra colonial de la OTAN en Libia o se lavaron las manos de
ella. Las figuras tan diversas como Noam Chomsky, Ignacio Ramonet, Achcar
Gilbert, Baroud Ramsy, Al Giordano, entre muchos otros, apoyaron el pretexto
para la guerra contra el gobierno de Libia, a pesar de que claramente
disfrutaban de un apoyo mayoritario en el países.
El fracaso de la izquierda internacional ha
sido doble, tanto moral como intelectual. El fracaso fue uno de los
intelectuales de basura en la basura que sale-. En sus diferentes formas,
Chomsky, Ramonet, Giordano y el resto se han hecho en gran medida su reputación
al criticar los mecanismos que crean la opinión mayoritaria. En Libia, se
acepta sin crítica, la información producida en total armonía con el estilo y
el contenido de las principales empresas internacionales de guerra psico-puntos
de venta.
Esta falta de autenticidad intelectual
profunda se vio compensado por la extrema izquierda, el colapso moral
internacional no para defender a Libia y su pueblo contra el círculo vicioso de
la agresión militar colonial. En general, la comunidad internacional ha
dejado una serie de posiciones adoptadas neo-colonialistas. Estas
posiciones han compartido el supuesto neo-colonial que su propia cultura y sus
propias compañías ofrecen mejores modelos para las personas en Libia como el
sistema de mayoría de los libios y apoyados en el que trabajaban para ellos
mismos.
Ningún esfuerzo serio se hizo para apoyar las
negociaciones de paz propuesto por la Unión Africana y los países del
ALBA. En América del Norte, apoyada por el negro a la izquierda para el
gobierno libio fue ignorada. En Europa, los medios de comunicación
prestigiosos como la izquierda Censurado opinión Rebelión argumentando en contra
de Libia contra la CNT-revolucionaria golpe de Estado.
La demonización de Muammar Gaddafi y la
censura por omisión de la izquierda es indistinguible de la de los medios
corporativos.Toda persona que declare la solidaridad con el gobierno libio y su
gente ha sido arrastrada por el apoyo a la dictadura. Libia ha demostrado
que la función sistémica de la gestión de la clase intelectual de la izquierda
internacional es para cubrir su legitimidad la vivienda, la complicidad y el
final del mismo sistema que supuestamente rechazan.
Ellos aceptaron información falsa en completo
acuerdo con la propaganda imperialista. Ellos colaboraron en el abandono
de los principios fundadores de la ONU. De hecho aceptó la introducción
del principio de agresividad imperialista de la responsabilidad de
proteger. Los argumentos sobre la conquista de Libia la OTAN ha demostrado
que en América del Norte y Europa. la izquierda internacional es
esencialmente una aglomeración de la eficacia de la ficción más o menos, y la
pertinencia.
La utilidad de ficciones enviado por las
cadenas alrededor de los individuos, como Ramonet, Chomsky y el resto es que
actúan como intermediarios con los liberales progresistas leales al capitalismo
redes de las empresas y los centros de poder imperial que misma. Medido
por su capacidad para alcanzar el poder político importante, las variedades
norteamericanas de la ficción y la izquierda europea han experimentado el
fracaso en las últimas décadas. Su colapso moral e intelectual de Libia
debería haber ninguna sorpresa.
Lo que fue y es tan sorprendente es el grado
de identificación de la izquierda internacional con la falsa retórica de las
estructuras a las que supuestamente critican. Para la gente en Nicaragua,
que va un largo camino para explicar el reconocimiento a regañadientes de los
importantes progresos en nombre de la mayoría pobre llevó a cabo bajo el
gobierno del presidente Daniel Ortega. Tal como Libia, Nicaragua también
ha sido víctima de los prejuicios de clase / cultural la izquierda neocolonial
Internacional.
Implicaciones
para América Latina
Estos prejuicios han hecho imposible para la
mayoría de lo que pasa por la izquierda en América del Norte y Europa para
reconstruir de manera convincente a sí mismos lo suficiente como para ganar el
apoyo de la mayoría a pesar de la crisis crónica económica en sus países.Crisis
sistémica del Oeste pone en peligro la capacidad futura de los Estados Unidos y
sus aliados para proyectar su poder a nivel mundial y frenar su disminución
relativa frente a países asiáticos como China y la India. Esa es la razón
por la OTAN y sus aliados han destruido Libia y ahora amenazan a Siria e Irán.
Tal entorno internacional volátil, representa
un enorme reto a los pueblos latinoamericanos y sus líderes. Esto
demuestra la perspicacia de la sabiduría estratégica y táctica de la dirección
política de los países del ALBA para desarrollar rápidamente la solidaridad en
la cooperación comercial y el desarrollo y el fortalecimiento a largo plazo la
integración regional. Claramente, América Central y el Caribe son blancos
vulnerables para el futuro de agresión de EE.UU..
Los Estados Unidos y sus aliados apoyaron a
los exitosos golpes de Estado en Haití y Honduras, y participaron activamente
en el intento de golpe en Venezuela, Bolivia y Ecuador. No puede así
derrotar al gobierno en Siria y decide que las probabilidades están en contra
de ellos en el caso de un ataque militar contra Irán. ¡Que se vayan o no
para atacar a Irán, los Estados Unidos y sus aliados europeos es probable que
agudizar su postura agresiva contra los gobiernos independientes en América
Latina.
Irán
Hoy :Preparados para hacer frente a cualquier amenaza